miércoles, 4 de noviembre de 2009

El futuro ya está viejo


En el tiempo que queda hasta las Navidades se nos va a bombardear con una oferta sin precedentes de lectores-e (e-readers). Las grandes superficies comercializan todo aquello que les cae encima; el Corte Inglés saca el suyo propio con algunos libros precargados; los foros de debate abundan a lo largo y ancho de nuestro sector; se presentan proyectos consolidados (Todoebook, e-libro o digitalia) y otros que están dando sus primeros pasos (futurbook, e-codex,...) y otros que están a punto de salir.
Y cuando nos lo creíamos tan felices, nos llega el anuncio de lo lectores-e en color por parte de empresas como Fujitsu, Asus, Sony,...
El Papyre se anuncia próximamente como táctil y conexión a internet, puntos que otros fabricantes ya tenían.


Una de las posibles evoluciones para el color se basa en la utilización de cristales fotónicos, que darían lugar a pantallas que pueden competir con las LCD y plasma. La compañía Opalux trabaja desde hace años en una tecnología llamada P-Ink (tinta fotónica), capaz de reproducir color manteniendo las ventajas de las pantallas monocromas.



Sin embargo, todavía queda bastante camino por recorrer ya que unos se inclinan por el lector-e de doble pantalla (monocróma y color) y los otros continuar investigando para una sola pantalla de tinta electrónica.
En la Feria de Las Vegas a principios de 2010 se van a presentar prototipos por parte de distintos fabricantes, porque lo cierto es que aún no hemos podido tocar ninguno.
En estos momentos la mayoría de los editores estamos inmersos en dotar de contenidos las peticiones de todas estas plataformas (a la que cada uno se haya asociado), negociando derechos, convirtiendo formatos,...
En mi opinión estas prisas no son buenas y debemos sopesar cuales serán nuestros próximos pasos, pero sin pausa. El estar presentes en esta nueva forma de negocio será, quizás para algunos, la supervivencia en la reconversión industrial que se avecina. Sin olvidarnos de que las empresas de ANELE se están dotando de los medios técnicos adecuados para dotar de contenido a esas pizarras electrónicas u ordenadores que lentamente, muy lentamente, comienzan a llegar a algunos colegios.

Jorge Ruiz

1 comentario:

Claudio Cerdán dijo...

En cuanto salgan los lectores a color dejo de comprar cómics. Así de claro.

Lo de una pizarra electrónica en los colegios... espero que sea a prueba de bombas. ¿Qué pasará el día que se estropee? ¿Tendrán que usar -glubs- tizas? Qué paso atrás más penoso.