sábado, 11 de octubre de 2008

LIBER

Ha terminado LIBER, celebrado este año en Barcelona, y entre negocio y negocio, no podían faltar los comentarios sobre la crisis económica. La general y la específica, si es que se puede hacer esta distinción.

No entiendo de protocolo, pero no parece razonable que el Presidente de la FGEE, organizadora del Liber no esté al lado de las autoridades. D. Jordi Úbeda es el segundo por la derecha. El Ministro de Cultura y el Presidente de la Generalitat son los dos del centro.

Se ha presentado en este marco el avance sobre la salud del sector del libro, que según la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), es muy buena. Los españoles leen más y, además, en todos los formatos. Habrá que esperar a su lectura reposada cuando se presente el citado Informe a finales de este año.

De hecho el Sr. Úbeda en sus discurso de inauguración dijo que "El salón ha despertado un moderado optimismo entre los editores españoles ante la actual coyuntura económica".

Sin embargo, las cosas no pintan muy bien a nivel concreto de los actores que intervienen en el comercio del libro. Como comentábamos hace un mes, alguien dice que nos va bien, pero ocurre que es todo lo contrario.

La cadena de distribuidoras y librerías que están cayendo aumentan según pasan los días. Las deudas que se tienen con un gran número de editoriales pueden provocar la caída de algunas de estas de distinto tamaño. Y cuando se va al banco a por algo de financiación,…¡ah, la crisis!

Pero además hay alguna responsabilidad por parte de la Administración: ¿Qué pasa con el pago de las licitaciones de las Bibliotecas? Más de 2 millones de € adeudan las Comunidades Autónomas y los Ayuntamiento a librerías y distribuidoras. Deudas aplazadas en el mejor de los casos hasta el año que viene.

¡Oiga, Sr. Solbes, sí es a Vd.!, ¿no nos puede adelantar directamente esos 2 millones a cuenta de los que van a dar a los pobrecitos Bancos? Prometemos solemnemente devolverlos cuando nos paguen los libros.

Lo que dice la FGEE es como lo que oíamos hace unos meses: no hay crisis, son ajustes en el mercado, hay turbulencias, no hay que sembrar la desconfianza. Presentar un informe sobre datos antiguos, sin ponderar, ni reajustarlos con la situación del mes a mes, es, cuando menos, una forma de mirar para otro lado.

Llamar a las cosas por su nombre, es el primer paso para afrontar una realidad; utilizar circunloquios sólo pretende distraer al personal.

Jorge Ruiz

PD:

Se acaba de publicar el detalle de la Ayudas al Fomento de la Lectura que convoca anualmente el Ministerio de Cultura. Se recomienda leer dicha publicación, pero aquí va un adelanto.

Casi 3 millones € para 177 editoriales concursantes de todos y cada uno de los idiomas del país: salen unos 17.000 € por editorial, independientemente del número de proyectos presentados a las ayudas, (hay que señalar que el editor debe entregar al Ministerio entre 50 y 600 ejemplares del título ayudado). El podium es el siguiente: 1º Almuzara con 57.000 €; 2º Tibidabo con 52.000 € y 3º Biblioteca Nueva con 43.000 €.

Anaya se lleva 27.000 € por la entrega de 400 ejemplares de las Obras completas de Larra (2 vol.), a 67 € cada uno.

Una curiosidad es la adjudicación al Grup Editorial 62, por nueve libros, 30.000 € y a Ediciones 62, por nueve libros, 26.000 €.

1 comentario:

el llibreter dijo...

También es curiosa la adjudicación a Grupo Anaya (32.300€)por un lado y Alianza editorial (14.280 €) por otro y Editorial Algaida (20.400 €) por otro más: Alianza y Algaida también son Grupo Anaya (total: 66.980€).

O de "Librería y editorial Renacimiento" por un lado y "Librería Renacimiento" por otro (42.610€ en total).

Pero sólo es curioso —y nada tendencioso, por supuesto— señalar el caso de Edicions 62 y Grup 62.

Sí, curioso, muy curioso. Suerte que no soy nada susceptible.

Saludos cordiales.